21 enero 2006

UN POEMA DE HILARIO BARRERO

SUBJUNTIVO

Y tener que explicar de nuevo el subjuntivo,
acechante la tiza de la noche del encerado en luto,
ahora que ellos entregan sus cuerpos a la hoguera
cuando lo que desean es sentir el mordisco
que tatúa con rosas coaguladas sus cuellos
ofrecidos
y olvidarse del viejo profesor que les roba
su tiempo inútilmente.
Mientras copian los signos del lenguaje,
emotion, doubt, volition, fear, joy...,
y usando el subjuntivo de mi lengua de humo
mi deseo es que tengan un amor como el nuestro,
pero sé que no escuchan la frase
que les pongo para ilustrar su duda
ansiosos como están de usar indicativo.
Este será su más feliz verano
el que recordarán mañana
cuando la soledad y la rutina
les hayan destrozado su belleza,
la rosa sin perfume, los cuerpos asaltados,
ajadas las espinas de sus labios.
Pero hoy tienen prisa, como la tuve yo,
por salir a la noche, por disfrutar la vida,
por conocer el rostro de la muerte.

Uno siente la soledad igual que el entrenamiento de un atleta aficionado: correr para nada, correr por el simple hecho de hacerlo, correr para reivindicarse, porque una soledad olimpica, una derrota llena de un estadio no es soledad: la soledad es uno mismo siempre. Es el amor esto: tiempo que no fue, donde los jovenes se quedaron.
Y entienden, como el filosofo, que todo es guerra y que es preferible cuando se ejercita en colchones sin mañana, sin preguntas, sin tatuajes sentimentales ni genitales: entonces como usar subjuntivo o duda
-solo para la ultima edad es el tiempo de la incertidumbre- cuando todo indica que es el momento presente, la juventud, lo que vale.
Este colega, collige virgo rosa, nos pone para recordarnos donde algunos intuyeron que lo unico que merece la gloria es un cuerpo.
Efimero el orgasmo de su nombre o una paja.

10 enero 2006

UN POEMA DE HECTOR URRUSPURU

Semi-haiku (gracias por esta mini-inspiración Javier Aduris)

mosca en el bonsái
se siente halcón...
se le nota el barrio cuando vuela.


El "aura" mediocritas de los antiguos, la sensacion de frontera, la limitacion, el tiempo y la metafisica de los medievales, la angustia, el "finis terrae", el otro mundo, lo que hay mas alla...como dijo Calvino, el cual veia cosmogonias encerradas en un epigramatico poema, moderno en Las Cosmicomicas, clasico como un filosofo griego en sus escritos: todo no es mas, simplemente es cercano.

OTRO POEMA DE JUAN BONILLA

Amigos para siempre

Donde dije te presto mis juguetes
debe decir devuélveme mi bici.
Donde dije detesto al profe de Ética
debe decir no eres más que un soplón.
Donde dije flipo por Laura Hernández
debe decir que seáis muy felices.
Donde dije amigos para siempre
debe decir qué más quisieras tú.

(Multiplicate por cero, 1996)

Aparentemente, y era su papel principal, "Multiplicate por cero" -de titulo tan bartiano-, respondia al catalogo de libros recomendados para lo "infantil" (Gloria Fuertes mantuvo esta etiqueta para quienes no la leian en serio, quiza, sin ella proponerselo, para deshacerse de ese lector que ha renunciado a la sorpresa, a lo sorprendente).
Dar la voz a un infante y no parecerlo o viceversa y a ello sumarle que el final es poetico es un acierto que logra. Este poema, con la ironia aprendida del escritor maduro, se une a la voz del nene, al desasosiego de lo cotidiano que vive, y es una minima venganza contra todo el alrededor -porque el alrededor esta en lucha permanente contra el, contra nosotros-. Y esta union es tan natural, el escritor supo aclimatarse a su personaje recordando tal vez algun episodio en su infancia, "Y así es como canta el hombre por su niño antiguo...", Agustín García Calvo, que nadie tiene que preguntarse por "el escritor que escribe el poema", el profesional que firma este grafito, este minitestamento del tempus fugit y del que os den a todos.
Un epigrama soberbio. (Lejos de The Beatles y su all you need is love)

UN POEMA DE JUAN BONILLA

DENOMINACIÓN DE ORIGEN: EXTRANJERO

La patria es estar lejos de la patria:
una nostalgia de la infancia en noches
en que te sientes viejo, una nostalgia
que sube a tu garganta como el agrio
sabor del vino en las resacas duras.

La patria es un estado: pero de ánimo.
Un viejo invernadero de pasiones.
La patria es la familia: ese lugar
en el que dan paella los domingos.

Una patria es la lengua en la que sueñas.
Y el patio del colegio donde un día
bajo una lámina de cielo oscuro
decidiste escapar por vez primera.

Mi patria está en el cuerpo de Patricia:
mi himno es su gemido, mi bandera
su desnudez de doce de la noche
a ocho de la mañana. Tras la ducha
mi patria va al trabajo, yo me exilio.

(Partes de Guerra. 1994)

Esta es la mejor politica que conozco, uno de los mejores manifiestos: "Mi patria esta en el cuerpo de Patricia". En la modernidad no encuentro un mejor verso que este, que rinda homenaje a los antiguos o a los clasicos. (No en vano el autor juega con Lope: "Esto es amor, quien lo perdio lo sabe).
Escribir de forma "tan clara", -a veces a mi este lenguaje me recuerda la posicion de Garcilaso en su epoca, Bonilla es uno de los poetas "mas limpios", nunca criptico, aunque tiene sus juegos, sus homenajes a la literatura, puro humor , que no viene el humor sino de haber aprendido toda una literatura, toda una poesia, supone la adaptacion de un modo a la modernidad-.

Hablando del poema, esa carcel que supone ser la patria, para la que se han compuesto grandilocuentes himnos, Bonilla la dinamita desde lo moderno con lo individual, lo individual se revela contra un concepto puramente politico a traves de una poetica, del amor: la patria ya no tiene bandera sino parpados, la patria tiene nombre de chica. Lo colectivo, donde todos cabemos bajo esa denominacion o dominacion, bajo esa superestructura, es puesto en duda hacia lo privado.
(En el poema, late por debajo el topico de la recusatio, toda una historia de la literatura occidental. Lo que ya hablamos: Bonilla tiene bien aprendidos los modelos, solo quien asi lo ha hecho puede volver a escribirlos y hacer que suenen como originales, como si hubiesen sido escritos por primera vez.)

Lo tradicional en el concepto ha desaparecido.

02 enero 2006

UN POEMA DE BENJAMIN PEREZ COBO

Los malos días
Hoy siento las gafas demasiado grandes; y derrumbadas, contemplo el mundo con
ombligo monocular. No vengan a decirme las aceras sus ansias de semáforo, ni arrojen vagabundos, con
su verbo encarnecido y su aire embotellado.
Que no me engañen los cielos pintándose nubes.
El ojo clínico nunca ganó al microscopio.
Hoy no me sirven las recetas los oníricos doctores, ni iré a la consulta de
psiquiatras enamorados - que nunca recetaban nada -.
No voy a construirme un viento en la ventana, me parece perverso intentar volar
como un pájaro.
Los asesinos se mueren, en un mal día.
Las palabras se mudan.
Hoy es posible que encuentre una muerte que quiera charlar un rato.
(de www.cielosdecarton.blogspot.com))

Cuando un poeta tiene y se le reconoce una voz propia asistimos a un hecho irrepetible o al magisterio de una sucesion repetida de hechos: el aprendizaje de una lengua que a su vez ya fue domada por otro poeta. Que uno de los tonos de Benjamin nos recuerden al mejor Girondo significa que la genesis del lenguaje poetico tiene su continuacion en los lectores profundos, esos lectores potenciales que acaban convirtiendose en escritores seguros, en poetas seguros. Pero en Benjamin hay algo mas que Girondo, una poetica sentimental minimalista, y por minimalista entendemos la atencion prestada a esas cosas que apenas tienen importancia, leed el verso: "No voy a construirme un viento en la ventana", un verso que podia pasar desapercibido, por la apariencia de "facilidad" y "sencillez", y que constituye todo un microcosmos poetico, una poetica y una estetica, una finisima vision, microvision a primera vista que nos desemboca hacia el pensamiento infinito, el choque de dos elementos "aparentemente" insulsos, cotidianos, "normales", que son como signos de admiracion sobre una pagina en blanco.
Y es que Ben es uno de los pocos poetas actuales que sorprenden.
En esta ocasion "el ojo clinico si que gano al microscopio".